Vistas de página en total

sábado, 12 de noviembre de 2011

Te pido a tí.

Un millón de cosas que pedir, y fue a tí a quién pedí. Pedí a las estrellas que el mundo se parara justo cuando estabamos juntos riéndonos e intercambiando miradas. A la Luna le pedí que me regalara todos y cada uno de tus días, para así poder estar todo el tiempo contigo. Le pedí al Sol tu sonrisa, para así poder saber que si tu eres feliz, yo también lo era. A los sábados, a los sábados simplemente no le pedí nada, tentaba a la suerte haber si aparecías o no, pero yo, yo estaba allí esperándote cada noche. Y a tí, a ti te pedí que cuidaras de mi corazón, que lo protegieras como a tu vida y que lo cuidarás como me cuidabas a mi. Y a mi, como no, me pedí que por favor no dejara de quererte, bajo ningun concepto dejara de hacerlo; claro que siendo tú, jamás dejaría de hacerlo. Ah, y se me olvidaba otra cosa: Al destino le pido que no nos separe, que siempre seas tu para mí y yo para tí. Que a quien pido es a tí, y al que únicamente quiero eres tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario